LA LEYENDA DEL SOMBRERÓN (Leyenda de Guatemala)

El Sombrerón

En las tierras altas de Guatemala, existe la aterradora leyenda de El Sombrerón, un misterioso personaje que aparece durante las noches para atormentar a las jóvenes desprevenidas. Este ser es descrito como un hombre pequeño, pero muy elegante, vestido con un traje oscuro y un enorme sombrero que le cubre gran parte del rostro. Siempre llega montado en un caballo negro y lleva consigo una guitarra, con la cual entona melodías hipnóticas que encantan a sus víctimas.

La leyenda cuenta que El Sombrerón aparece especialmente ante mujeres jóvenes de cabello largo y ojos grandes. Se dice que él se enamora perdidamente de ellas y comienza a seguirlas, apareciendo cada noche en sus ventanas o en sus sueños, susurrando canciones con su guitarra y peinando sus largas cabelleras. Pero su amor no es una bendición, sino una maldición. Las jóvenes que son perseguidas por El Sombrerón caen en un estado de tristeza y desesperación, ya que no pueden dormir ni comer, obsesionadas por su presencia.

Una de las historias más conocida cuenta que una joven llamada Susana, de una aldea pequeña, fue vista por El Sombrerón mientras paseaba por el campo. Fascinado por su belleza, comenzó a seguirla cada noche. Susana pronto comenzó a notar una sombra cerca de su ventana, acompañada de la suave melodía de una guitarra. Aunque al principio pensó que era solo un sueño, pronto se dio cuenta de que algo estaba muy mal.

Cada noche, la presencia de El Sombrerón era más intensa. La joven comenzó a perder el apetito, y su salud empeoró rápidamente. Nadie en la aldea sabía cómo ayudarla, hasta que su abuela, recordando las viejas leyendas, decidió cortarle el cabello. Según las creencias, El Sombrerón perdía interés en las jóvenes si ya no tenían su cabello largo, que era lo que más le atraía.

Desesperada, la familia de Susana accedió a cortarle el cabello, y después de eso, El Sombrerón dejó de aparecer. Sin embargo, la joven nunca se recuperó completamente, ya que las noches de insomnio y el constante acoso la habían dejado débil y marcada por el miedo.

Desde entonces, la gente del pueblo advierte a las jóvenes que no se paseen solas al atardecer y que no permitan que su cabello crezca demasiado largo, pues El Sombrerón puede aparecer en cualquier momento para encantar y perseguir a quienes llaman su atención.

La leyenda de El Sombrerón sigue viva en las comunidades rurales de Guatemala, como una advertencia sobre los peligros de la noche y las fuerzas misteriosas que acechan en la oscuridad.